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Haití

La presencia oblata en Haití se remonta a la década de 1950, cuando los oblatos de la provincia de San Juan Bautista, principalmente ministrando en Nueva Inglaterra, aceptaron la invitación para establecer una misión en Haití. La presencia oblata se centró inicialmente en todo el sur de Haití hasta Tiburón. Hoy en día, los oblatos también son muy activos en el noreste.

La construcción de la iglesia local en este empobrecido país ha sido uno de los principales focos del trabajo. Esto ha incluido el aumento de los recursos necesarios para construir iglesias, clínicas, escuelas y una serie de iniciativas cooperativas basadas en la comunidad. Las prioridades importantes siguen apoyando y, a veces liderando, los esfuerzos de los líderes religiosos para proteger y promover los derechos humanos y la justicia. Esto incluye responder a la difícil situación de los haitianos en la frontera con la República Dominicana.

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